Bogotá, 8 sep (Sputnik)-. Este viernes culmina en Colombia la Conferencia Latinoamericana y del Caribe sobre Drogas con la llegada del presidente de México, Manuel Andrés López Obrador, quien se reunirá con su homólogo, Gustavo Petro.
El encuentro entre los dos mandatarios marca un hito en la historia del combate al narcotráfico, pues ambos han querido promover una política que priorice a las personas, el medio ambiente y los derechos humanos y dejar atrás la llamada «guerra contra las drogas».
El periodista e investigador Néstor Rosanía habló con la Agencia Sputnik sobre la importancia de este encuentro.
«Lo que ha planteado el Gobierno de Petro es un nuevo enfoque en la lucha contra las drogas, que incluye un componente llamado ‘corresponsabilidad de los actores’. En la lucha antidrogas, los países productores, como Colombia y Perú, junto con los países de tránsito en Centroamérica y México, tienen un peso significativo. En estos lugares, la lucha se aborda principalmente como una política criminal contra las drogas. Sin embargo, cuando la cocaína cruza la frontera hacia Estados Unidos, se adopta una posición diferente, tratándola como un problema de salud pública en lugar de un enfoque punitivo», explica el especialista.
Rosanía agrega que «lo que se propone es la necesidad de una mayor igualdad y corresponsabilidad en la política antidrogas, involucrando a todos los actores, desde los productores hasta los países de tránsito y los consumidores.»
El investigador, especialista en conflictos armados, recalca que a pesar de que desde que se posesionó en agosto de 2022 el presidente colombiano ha prometido cambiar el abordaje de la lucha contra las drogas, es necesario que Estados Unidos identifique y hable abiertamente sobre quiénes manejan el negocio en su país.
«Petro, en su discurso de posesión, mencionó que Colombia iba a modificar su enfoque en la lucha contra las drogas. Entonces, lo primero que debemos destacar, especialmente aquellos que trabajamos en temas de seguridad, se puede resumir de la siguiente manera: ¿quién es el equivalente de Pablo Escobar en Estados Unidos? ¿O el Chapo Guzmán de Estados Unidos? ¿Existe un cartel de Cali, Medellín o Sinaloa versión Estados Unidos? Estas figuras deben existir, pero el gobierno estadounidense rara vez divulga quiénes son los grandes capos de la mafia en su país. En otras palabras, no son visibles para el público», dice Rosanía.
Guerra perdida
Sobre la viabilidad de este cambio de enfoque, el especialista cree que es viable una mirada distinta para la región y para Colombia, pero hay que reconocer, en primer lugar, el fracaso de la guerra contra las drogas.
«Los resultados fueron tan malos en materia de narcotráfico que hoy se puede resumir como una lucha perdida. Podríamos decir que la cifra importante es que actualmente hay más coca que cuando comenzó el Plan Colombia, hace más de 20 años. Entonces, esta es una batalla que ha fracasado y no ha producido los resultados esperados. Tras la caída de los carteles y la muerte de Pablo Escobar, el narcotráfico no se detuvo, sino que se triplicó debido a su descentralización. Por lo tanto, lo que ganamos ahora es el reconocimiento estatal de que, en primer lugar, ha habido un fracaso en esta lucha», afirma.
El especialista añade que además del cambio de política, es necesario entender que tanto Colombia como el resto de los países de la región dependen de lo que defina EEUU en esta área.
«Colombia, Perú y México son países satélites que dependemos en gran medida de la política exterior de Estados Unidos. En términos de legalización, se ha dicho que mientras Estados Unidos y Europa no replanteen su enfoque en la lucha contra las drogas, los países latinoamericanos no tomarán medidas significativas. Sin embargo, a medida que Estados Unidos ha ido cambiando su postura, por ejemplo, en el tema de la legalización de la marihuana, primero permitiendo su uso medicinal, luego recreativo y finalmente aplicando impuestos, como Canadá, el impacto se ha ido sintiendo de manera paulatina en la región», explica.
La conferencia, en la que participan delegaciones de 33 países del hemisferio, incluidas organizaciones internacionales y no gubernamentales, expertos y miembros de la sociedad civil, comenzó el jueves.
Los ministros de Exteriores y representantes de los países participantes, liderados por el canciller colombiano Álvaro Leyva Durán, redactarán el borrador del documento, que será entregado a los dos jefes de Estado.
En su visita a México, el año pasado, Petro esbozó el borrador de este nuevo esquema de lucha antidrogas y desde entonces quedó planteada la posibilidad de una cumbre de presidentes en los próximos meses para ampliar el tema. (Sputnik)
