Tel Aviv, 8 Oct. (EUROPA PRESS) – Las sirenas que advierten sobre la llegada de ataques con cohetes han vuelto a sonar este domingo por la noche en el sur de Israel, concretamente en las ciudades de Sderot, Kibbutz Nir Am, Yad Mordechai y Netiv Ha’asara, todas cerca de la Franja de Gaza.
A primera hora de la noche, una casa en Sderot ha sufrido el impacto directo de un cohete, que no ha causado heridos, pero sí daños importantes, según ha informado el periódico ‘The Times of Israel’.
El alcalde de esta ciudad, Alon Davidi, ha pedido a los residentes que permanezcan en sus casas con puertas cerradas y que no las abran hasta que se les indique lo contrario, mientras las fuerzas de seguridad israelíes trabajan para encontrar y detener a un número indeterminado de terroristas palestinos que se infiltraron esta mañana desde Gaza.
Davidi ha denunciado la «masacre de civiles inocentes en todas partes» y ha instado a los dirigentes de Israel a asestar un «golpe significativo» a Hamás. «Necesitamos apoderarnos de Gaza y matarlos, hay que borrarlos», ha llegado a decir en el canal de televisión Channel 12.
Israel ataca posiciones palestinas
Las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF) han informado de que están atacando objetivos de la milicia palestina Hamás en la Franja de Gaza.
«Preliminar: Las FDI ahora están atacando objetivos de la organización terrorista Hamás en la Franja de Gaza, más detalles a continuación», han escrito en una publicación en su cuenta de la red social X, antes Twitter. Este mismo mensaje ha sido también compartido por la Fuerza Aérea de Israel.
Unas horas antes las FDI habían explicado que «tras la evaluación de la situación, se decidió emitir una orden de cierre de zona militar en la zona de la División de Gaza», por lo que han aclarado que «entrar en la zona está estrictamente prohibido y piden al público estar atentos y no entrar en la zona».
El último balance sitúa al menos 300 las víctimas en Israel y en 232 las víctimas en la Franja de Gaza como consecuencia de la ofensiva por tierra y aire de Hamás y las represalias israelíes. A ellos hay que sumar los miles de heridos y las decenas de israelíes apresados por las milicias palestinas.