Ramala, 14 oct (Sputnik).- Todos los hospitales importantes de la Franja de Gaza quedaron total o parcialmente destruidos como resultado de los bombardeos israelíes durante la semana, declaró a Sputnik la ministra palestina de Sanidad, Mai al-Kaila.
«El Hospital (de la ciudad de) Beit Hanún, el único de la provincia nororiental, fue bombardeado, el hospital infantil de Al-Durra también fue atacado con fósforo blanco, prohibido internacionalmente. El Hospital Indonesio, el Hospital Al-Shifa y el Hospital Central de la Franja de Gaza fueron parcialmente destruidos, y otras instalaciones médicas también quedaron fuera de servicio», dijo a esta agencia.
Además, señaló que los refugios y hospitales están llenos, y agregó que los recursos médicos están a punto de agotarse.
Según la ministra, la mitad de las víctimas del bombardeo de Gaza fueron mujeres y niños.
Entre otras cosas, confirmó la llegada a la frontera con la Franja de Gaza de un avión de Jordania, tres aviones de los Emiratos Árabes Unidos, así como 106 convoyes de Egipto y de la Organización Mundial de la Salud.
Sin embargo, indicó que la entrega de ayuda humanitaria es imposible debido a la bloqueo de Gaza por parte de Israel.
Al-Kaila también advirtió sobre la posibilidad de que se propaguen epidemias en la Franja de Gaza como resultado de la escasez de suministros médicos.
Además, pidió a la comunidad internacional «intervenir inmediatamente para cesar los bombardeos indiscriminados contra civiles y hospitales desarmados en la Franja de Gaza y proteger al personal médico, ya que los ataques a ambulancias violan todas las leyes y acuerdos internacionales».
El pasado 7 de octubre, el movimiento palestino Hamás lanzó miles de cohetes desde la Franja de Gaza en un ataque sin precedentes e infiltró decenas de milicianos armados en las zonas fronterizas del sur de Israel, por lo que el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, declaró que el país «está en guerra».
En respuesta al ataque sorpresa de Hamás, el ejército israelí movilizó a 300.000 reservistas, lanzó varias oleadas de ataques aéreos sobre Gaza y está preparando una ofensiva terrestre.
El 9 de octubre, Israel impuso un bloqueo total al enclave palestino, cortando los suministros de electricidad, combustible, alimentos y agua, y esta mañana instó a los civiles residentes en la ciudad de Gaza a desplazarse al sur de la Franja hasta nuevo aviso, por su propia seguridad.
Según la ONU, ese traslado afectará a unos 1,1 millones de personas y podría acarrear consecuencias humanitarias devastadoras.
Según los últimos datos disponibles, la escalada de violencia ha causado más de 1.300 muertos y casi 3.300 heridos en Israel, y más de 2.200 muertos y unos 8.700 heridos en Gaza, así como entre 100 y 150 personas, tanto militares como civiles, secuestradas durante el ataque en territorio israelí y retenidas como rehenes en el enclave palestino. (Sputnik)
