Addis Abeba, 27 oct (Prensa Latina) El presidente de la Comisión de la Unión Africana (UA), Moussa Faki Mahamat, expresó su apoyo a la posición, liderazgo y trabajo del secretario general de la ONU, Antonio Gutérres, en los territorios palestinos ocupados, se conoció hoy.
De acuerdo con Mahamat, están en consonancia con el derecho internacional y con la postura de la UA y las resoluciones pertinentes de las Naciones Unidas.
Gutérres, al intervenir en el debate abierto convocado por el Consejo de Seguridad el miércoles pasado, alertó de claras violaciones del derecho internacional humanitario en el conflicto entre Israel y Palestina.
Exigió, ante todo, la protección de civiles en lo que consideró un momento crucial de las hostilidades. Es vital tener claros los principios, empezando por los fundamentales de respetar y proteger a los civiles, remarcó.
Rechazó las acciones de Hamas en territorio de Israel el pasado 7 de octubre, que calificó como actos de terror sin precedentes, al tiempo que destacó la importancia de reconocer que esa incursión “no ocurrió en el vacío; el pueblo palestino ha sido sometido a 56 años de ocupación asfixiante”.
El máximo responsable de Naciones Unidas exigió a ambas partes cumplir sus obligaciones en virtud de las normas internacionales del derecho humanitario y cuidar la conducción de operaciones militares para proteger a la población.
Asimismo, llamó a respetar y proteger los hospitales y la inviolabilidad de las instalaciones de la ONU que albergan a más de 600 mil palestinos.
Israel tras de 75 años de usurpar terrenos y liquidar millones de ciudadanos palestinos, se han comportado como verdaderos terroristas. Bien hace este africano en respaldar a Guterres en la ONU, cuando ese organismo ha dictado decenas de pronunciamientos y esos judíos se los han pasado por el arco del triunfo tales resoluciones. Bien sabemos de la ONU es otro tentáculo del norte, financiado y manejado para sus exclusivos intereses. Sin embargo, por la decidía de la comunidad mundial, ante el poder de EEUU se amedrentan y acobardan, perdiendo la capacidad de ejercer sus libertades y derechos democráticos que supuestamente ellos predican. En dos platos: Israel con Netanyahu a bajando al estilo apartheid sudafricano o nacismo alemán a esos extremos increíbles, aplicando su política belicista y genocida a límites imperdonables, los cuales la ONU deben poner fin, a pesar de su manifiesta dependencia. No hacerlo, sería traicionar el orbe.