Roma, 14 nov (Prensa Latina) Italia muestra un crecimiento del 300 por ciento en los ciberataques desde 2018 y es una de las naciones más afectadas del orbe, pero ocupa el onceno lugar mundial en concientización de esa amenaza, indica hoy un reporte.
De acuerdo con un análisis realizado por el grupo de seguridad informática italiano HWG Sababa, divulgado este martes en el sitio digital especializado BigData4, las compañías de este país, en particular las Pequeñas y Medianas Empresas (Pymes), adolecen de una postura de seguridad y conciencia de los riesgos cibernéticos.
Esto les impide a las mismas hacer frente de manera efectiva a las amenazas, en rápido crecimiento, señaló Alessio Aceti, director general de ese centro, que opera desde con sede en Verona, en la norteña región de Véneto.
“Este es precisamente el momento de educar a las personas para que actúen de forma correcta”, comenta Aceti, quien se refirió a un reporte divulgado recientemente por la Asociación Italiana para la Seguridad Informática (Clusit), el cual refiere una incidencia de ciberataques casi cuatro veces mayor que la del resto del mundo.
En los primeros seis meses de 2023, las víctimas italianas de ciberataques representaron el 9,6 por ciento del total global, mientras se concentraron en esta nación europea más del 37 por ciento de los episodios mundiales de hacktivismo, como se denomina a la utilización no violenta de herramientas digitales con fines políticos.
Para implementar una estrategia de ciberseguridad correcta, orientada a protegerte a ti mismo, así como a los negocios y la sociedad en general, se necesitan habilidades, pero todavía hay escasez de talento en este campo y se requiere de más formación del personal de las empresas, apuntó el experto
El tema del cibercrimen sigue siendo en gran medida subestimado por las organizaciones y las personas, además de verse amplificado por los escasos recursos dedicados a la investigación y desarrollo, por lo que se debe invertir más carreras universitarias en el campo de la ciberseguridad, agrega la fuente.
