Ciudad de Guatemala, 29 ene (Prensa Latina) La fiscal general Consuelo Porras invitó hoy al presidente de Guatemala, Bernardo Arévalo, a una reunión de trabajo el 7 de febrero, luego de evitar dos veces encontrarse con el mandatario.
La también jefa del Ministerio Público (MP) envió mediante una carta la propuesta para verse en su sede, con los funcionarios que este estime pertinente, para coordinar esfuerzos interinstitucionales a favor de las víctimas del delito, subrayó.
Puso a disposición el número de su secretaría privada para las coordinaciones respectivas y expresó que espera contar con la participación del gobernante en el objetivo de lograr la debida articulación en el marco de las respectivas competencias.
Porras se presentó esta mañana 15 minutos a reunión del Consejo de Ministros citada por Arévalo, pero –dijo- que como mujer de derecho se vio obligada a retirarse.
El jefe de Estado, acompañado de los titulares de cada cartera, explicó luego en conferencia de prensa que identificaron una negativa de la fiscal general a actuar conforme a la Ley y analiza las opciones que corresponden.
La segunda invitación cursada a la jefa del MP pretendía –enfatizó- “establecer una coordinación interinstitucional sobre aspectos de interés para el Gobierno”.
Ello, remarcó, de conformidad con los artículos 134, 183 inciso m, y 251 de la Constitución Política de la República, mientras reiteró que en ningún caso se trató de discutir y pedir información sobre casos específicos.
El presidente del país ejemplificó que estaban solicitando elementos sobre las políticas que el MP sigue a fin de ajustarlas a las del Ejecutivo.
Consideró que la fiscal general utilizó argumentos que no aplican, comunicó su decisión de retirarse y se rehusó a cumplir con su obligación legal, establecida en el artículo cuarto de la Ley Orgánica del ente investigativo.
Reiteró que su solicitud de renuncia a Porras es pública y notoria, está colocada sobre la mesa, “ella con sus actos define si la está aceptando o no”, reflexionó.
Arévalo, tras ganar las elecciones 2023, denunció las investigaciones del MP contra su partido Movimiento Semilla como la punta de lanza de un golpe de Estado en marcha, impulsado por el pacto de corruptos en Guatemala.
