Ciudad de Panamá, 15 jun (Prensa Latina) Cuestionada por organizaciones sociales, la estadía hoy en Panamá de la general Laura Richardson, jefa del Comando Sur de los Estados Unidos, tiene como paraguas la participación en un simulacro regional sobre desastres.
La alta oficial fue recibida por el ministro de Seguridad, Juan Manuel Pino, y el tema de las conversaciones giró en torno al auge de la migración irregular por la selva de Darién, en la frontera con Colombia, la verdadera razón de la visita, a juicio de los colectivos.
También participó de un panel de discusión junto a Pino y directores de las instituciones, con representantes de la Organización de Mujeres, paz y seguridad, un programa de Naciones Unidas (ONU) que promueve la equidad e igualdad de género en esas fuerzas.
En octubre del año pasado, la autoridad castrense asistió en esta capital a una reunión bilateral sobre seguridad.
Richardson, que visitó Panamá en junio de 2022, llegó nuevamente al país centroamericano “para reunirse con autoridades panameñas y participar en el diálogo de seguridad de alto nivel”, precisó entonces en un escueto comunicado la legación diplomática de Washington.
En el istmo ha causado revuelo entre las agrupaciones populares un reporte de la cadena estadounidense NBC News, acerca de que funcionarios de la administración de Joe Biden están presionando para que el Pentágono enviara tropas al Tapón del Darién para ayudar a frenar el contrabando de drogas, el tráfico de personas y la migración irregular.
Estadísticas oficiales señalan que en lo que va de año han cruzado la inhóspita selva con destino a Estados Unidos más de 170 mil viajeros, y la cifra podría escalar hasta 400 mil antes que concluya este año, lo cual inquieta a las autoridades locales.
Claro, y mi abuelita seguía virgen. El cuento de los migrantes, las luchas de las mujeres, criminalidad y otras excusas son a la legua la motivación de surtir de tropas la región. No será más bien, el famoso Canal de Panamá, que sirve para la comunicación del Pacífico y el Caribe. Son miles de toneladas de droga, armas, etc., que se mueven hacia EEUU y esta militar como en misa. Ya América la libre se les diluyó y están con la paja tras la oreja. Ya Nicaragua se surte de rusos y arriesgan, como en el Báltico, situar sendos misiles. A quien no quiere caldo, dos tasas. Hasta impresiona la tal generala.