Ramala, 17 sep (Prensa Latina) El número de colonos israelíes en Cisjordania y Jerusalén oriental pasó de 115 mil en 1993, cuando se firmaron los llamados Acuerdos de Oslo, a 750 mil en la actualidad, denunció hoy una fuente oficial palestina.
La Oficina Nacional para la Defensa de la Tierra y la Resistencia a los Asentamientos señaló en un comunicado que ese pacto fue eclipsado por oleadas sucesivas de colonización “que apuntan a las tierras restantes de los palestinos”.
A finales del pasado año más de 500 mil israelíes residían en uno de los 158 asentamientos ubicados en la Ribera Occidental y otros 250 mil en la zona ocupada de Jerusalén Este, recalcó.
Los Acuerdos de Oslo dividieron Cisjordania en tres zonas administrativas, denominadas A, B y C.
Las dos primeras incluyeron a la mayor parte de la población palestina en el territorio y se encuentran divididas en 165 unidades territoriales aisladas sin contigüidad territorial.
Por el contrario, la C, que constituye el 62 por ciento, quedó bajo control total de Israel y sí tiene contigüidad.
Esta división no fue arbitraria o carente de sentido, sino que fue deliberada e indicó objetivos implícitos, denunció la Oficina.
Al respecto, señaló que la zona C desde un principio fue “el objetivo de las ambiciones del Estado ocupante para su proyecto de asentamiento”.
Los sucesivos gobiernos israelíes utilizaron los acuerdos como cobertura política para sus actividades coloniales, afirmó.
La entidad alertó que en la actualidad está en marcha una cuarta ola de colonización “sin precedentes y con planes destructivos”.
Esta nueva fase comenzó con el ascenso al poder de la derecha radical tras su victoria en las últimas elecciones, celebradas en noviembre del año pasado, subrayó.
Semanas atrás, el portal Ynet reveló que los dirigentes de los colonos tienen planes de aumentar a un millón el número de israelíes en la ocupada Cisjordania para 2050.
La iniciativa fue presentada al primer ministro Bejamin Netanyahu por Yossi Dagan, presidente del Consejo Regional de Shomron, que tiene bajo su jurisdicción los asentamientos ubicados en la región septentrional de la Ribera Occidental, precisó la fuente.
El proyecto incluye la construcción de hospitales, zonas industriales, terminales de trenes y nuevas ciudades, así como la ampliación de carreteras y vías férreas, agregó.
Todas esas obras serán levantadas en tierras palestinas, pese a los repetidos llamados del Consejo de Seguridad de la ONU y el rechazo de la comunidad internacional a esa política expansionista.
