Washington, 2 Nov. (EUROPA PRESS) – Desmond Mills, uno los cinco expolicías implicados en la muerte de Tyre Nichols, un joven negro de 29 años que falleció el pasado mes de enero tras ser golpeado con porras y electrocutado con un táser, se ha declarado culpable de dos cargos federales por un caso que desató multitudinarias protestas en todo Estados Unidos.
Mills, de 33 años, ha acordado cooperar con la investigación federal y podrá ser llamado a testificar contra los otros cuatro exagentes implicados. En concreto, se ha declarado culpable por uso excesivo de la fuerza y proporcionar información falsa sobre el caso.
Según ha detallado en un comunicado la Fiscalía Federal del distrito oeste de Tennessee, Mills ha admitido que le golpeó repetidamente con una porra, que no le proporcionó ayuda tras la paliza y que tampoco avisó a sus superiores sobre los sucedido.
Asimismo, ha reconocido que dio información engañosa a los investigadores, como que vio a Nichols «resistiéndose» de forma agresiva en vez de admitir que uno de los agentes le golpeó repetidamente en la cabeza mientras otros dos le sujetaban.
Con este acuerdo, Mills ha aceptado una pena máxima de 15 años de prisión. Los otros cuatro implicados –Emmitt Martin, Tadarrius Bean, Demetrius Haley y Justin Smith–, se enfrentan a un juicio a nivel federal que está programado para el 6 de mayo de 2024.
Nichols, de 29 años, murió el 10 de enero días después de que la Policía le detuviera por presunta conducción imprudente con su moto. Su fallecimiento provocó una nueva ola de protestas que puso sobre la mesa el movimiento Black Lives Matter.
