En los años actuales es común ver muchos jóvenes desempleados en busca de una oportunidad laboral, muchos de estos de distintas clases sociales o con distinto nivel educativo y se suele escuchar a adultos decir que ellos solo buscan excusas para no trabajar ¿Pero se han tomado el tiempo para analizar por qué muchos de estos jóvenes no encuentran trabajo?
Los adultos suelen decir que encontrar trabajo es fácil, según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) el 34,2% de las personas desempleadas son jóvenes siendo esta población la más afectada por el desempleo. Ahora la mayoría de las vacantes laborales solicitan experiencia, pero no les brindan la oportunidad a las nuevas generaciones de ocupar esos puestos de trabajo para así tener la experiencia requerida, muchas veces prefieren darle el puesto a alguien que puede llegar a tener más años de trabajar para otra empresa y que consideran que esta más capacitado para ese ámbito. Tal y como nos explica Manuel Urquidi quien es un especialista líder en operaciones en la división de mercados laborales, el 25% de los candidatos a un puesto no lo obtienen por la falta de experiencia.
En muchos casos los jóvenes tienen una gran sed de aprendizaje, están empezando su ámbito laboral y muchos van a recibir su primer salario, lo cual es una gran motivación, pero según el Estado de la Nación tan solo un 13,2% logran tener un puesto alto, y un 24% un puesto regular, en comparación con un 27% de jóvenes que trabajan en el sector informal. Según el Colegio de las Ciencia Económicas, más del 35% de los jóvenes ocupados no cuentan con seguro del estado. Estas cifras nos muestran la desmotivación que puede llegar a tener un joven al no tener un empleo digno y caer en manos de los trabajos informales, ya que es una manera fácil y rápida de adquirir experiencia, pero a cambio de esto ellos podrían llegar a limitar sus capacidades puesto a que no tienen ningún incentivo a esforzarse y saben que no es un trabajo que los hará crecer. Por último, pero no menos importante he de destacar la discriminación que sufren los jóvenes respecto al salario debido a que el grupo de personas de 15 a 24 años suele ganar un 26% menos que las personas de otras edades.
Contamos con muchos jóvenes queriendo salir adelante, no obstante, Costa Rica presenta desempleo estructural porque hay muchas personas queriendo trabajar y a pesar de ello se brindan muy pocos trabajos, tal y como se ve reflejado en la tasa de desempleo en Costa Rica la cual se ubica, según el INEC, en 8.8%, afectando no solo a las personas adultas en busca de trabajo, sino que también a los jóvenes que desean empezar su vida laboral.
(*) Tania Díaz, estudiante de la Universidad Nacional de Costa Rica.
